Exfoliantes y mascarillas

Acabo de regresar del XVIII Congreso del Grupo Español de Cosmética y Terapéutica Dermatológica, donde se han presentado los últimos avances en dermatología cosmética: desde nuevos peelings superficiales a base de ácido salicílico hasta nuevos láseres de rejuvenecimiento, pasando por el estudio de los cambios de la piel en la mujer peri y postmenopáusica. Sobre este último tema participé en un simposium y le dedicaremos un blog próximamente.

Tras tratar el tema de los peelings realizados por el dermatólogo, he querido hablar en este punto de los exfoliantes y mascarillas faciales que podéis aplicaros en casa. Los dermatólogos recomendamos exfoliantes o scrubs faciales en los pacientes con piel con tendencia acneica o seborreica, mientras que reservamos las mascarillas hidratantes para las pieles más secas.

¿Se pueden aplicar exfoliantes en pacientes con ácne activo? Por supuesto, siempre que sean recomendados por vuestro dermatólogo. En el tratamiento tópico del acné se utiliza peróxido de benzoilo sólo o asociado a antibióticos, así como retinoides (derivados de la vitamina A). Los retinoides tienden a producir enrojecimiento y descamación en las primeras semanas de su aplicación, hasta que la piel se habitúa. En estos casos, es conveniente retrasar el uso de exfoliantes para no incrementar la irritación de la piel. Es precisamente esta irritación la que más incomoda a los pacientes, y puede provocar que suspendan los tratamientos. Actualmente existen nuevas formulaciones de retinoides como el adapaleno o asociaciones de clindamicina con peróxido de benzoilo que producen menor irritación.

¿Cómo actúan los exfoliantes? Provocan exfoliación mecánica suave mediante los gránulos de polietileno y al mismo tiempo exfoliación química con efecto antiséptico debido a su contenido en clorhexidina. Debéis saber que la clorhexidina es el mejor desinfectante de la piel, superior a la povidona yodada.

¿Cuál es la frecuencia óptima de aplicación? Se suele recomendar una vez al día, pero dependiendo de los tratamientos asociados, el tipo de piel o la clase de exfoliante, se puede reducir a dos o tres veces en semana. Aquí es donde entra en juego lo que se ha llamado 'el arte de la dermatología' en el que se combinan los conocimientos del dermatólogo con su intuición y experiencia junto con una buena comunicación con el paciente. Debéis recordar que hay que suspender el exfoliante una semana antes de los peelings químicos, aunque sean superficiales!.

En cuanto a las mascarillas faciales, al igual que los exfoliantes, hay que aplicarlos sobre la piel perfectamente limpia. Las que más se utilizan son las de caolín o arcilla para el acné y las hidratantes para cualquier tipo de piel. Después de los peelings también podemos utilizar una mascarilla impregnada de agua termal que calma el enrojecimiento!