El contorno de los ojos, piel extremadamente frágil, padece múltiples problemas estéticos capaces de arruinar la expresividad. La estilista española Felicidad Carrera asegura que el contorno de ojos necesita un producto específico, ya que la piel de esa z
El contorno de los ojos es una parte de nuestro rostro extremadamente frágil y sujeto a multitud de agresiones diarias que puede arruinar la expresión de nuestro rostro.
Son varias las razones por las que la piel de esta área es más propensa a la aparición de arrugas, de sequedad y de flacidez. Posiblemente, se deba a su enorme fragilidad derivada de un espesor insignificante, sobre todo si lo comparamos con el espesor del resto del rostro que es mayor. Por todo ello, cuidar el contorno de ojos debidamente, debe ser una tarea prioritaria a la hora de cuidar el aspecto de nuestra cara.
En general, el rostro está expuesto a diversos agentes externos y a las agresiones cotidianas, que merman nuestra expresión de forma importante, sobre todo sino mantenemos unas mínimas normas de higiene y cuidado personal en esta zona de nuestro cuerpo. De hecho, las agresiones del sol, el frío, el viento, la humedad y la contaminación atmosférica, junto a la falta de sueño, estrés, consumo de tabaco o alcohol o incluso pasar muchas horas frente al ordenador, son elementos que inciden directamente en esta parte tan frágil, fina y delicada de nuestro rostro. Y todo ello, sin tener en cuenta las miles de veces que parpadeamos al día.
Por todo ello, es una zona de especial riesgo que hay que cuidar de forma importante para evitar la aparición de las temidas patas de gallo y, por supuesto, de las arrugas, signo del envejecimiento. Así, la primera consecuencia es la aparición de hinchazón o edema, ojeras, bolsas y arrugas alrededor de los ojos.
Para estos problemas existen soluciones estéticas que suelen retrasar su aparición, como las cremas de contorno de ojos, sobre todo para combatir las ojeras. Sin embargo, exigen una disciplina muy importante y evitar los malos hábitos adquiridos. Si optamos por esta crema es recomendable que sea sin perfume para evitar reacciones. En el mercado hay diferentes opciones con texturas refrescantes y efectos balsámicos que incluyen ingredientes que ayudan a activar la circulación sanguínea.
En cuanto a las bolsas, conviene probar productos que tengan propiedades relajantes, que refresquen y descongestionen. También hemos de cuidar las cejas ya que enmarcan la mirada y son esenciales porque muestran la expresión del rostro. En cuanto al maquillaje conviene siempre aplicarse productos ligeros con moderación y siempre con una limpieza a fondo del rostro, antes de irse a dormir.
El contorno de los ojos es una parte de nuestro rostro extremadamente frágil y sujeto a multitud de agresiones diarias que puede arruinar la expresión de nuestro rostro.
Son varias las razones por las que la piel de esta área es más propensa a la aparición de arrugas, de sequedad y de flacidez. Posiblemente, se deba a su enorme fragilidad derivada de un espesor insignificante, sobre todo si lo comparamos con el espesor del resto del rostro que es mayor. Por todo ello, cuidar el contorno de ojos debidamente, debe ser una tarea prioritaria a la hora de cuidar el aspecto de nuestra cara.
En general, el rostro está expuesto a diversos agentes externos y a las agresiones cotidianas, que merman nuestra expresión de forma importante, sobre todo sino mantenemos unas mínimas normas de higiene y cuidado personal en esta zona de nuestro cuerpo. De hecho, las agresiones del sol, el frío, el viento, la humedad y la contaminación atmosférica, junto a la falta de sueño, estrés, consumo de tabaco o alcohol o incluso pasar muchas horas frente al ordenador, son elementos que inciden directamente en esta parte tan frágil, fina y delicada de nuestro rostro. Y todo ello, sin tener en cuenta las miles de veces que parpadeamos al día.
Por todo ello, es una zona de especial riesgo que hay que cuidar de forma importante para evitar la aparición de las temidas patas de gallo y, por supuesto, de las arrugas, signo del envejecimiento. Así, la primera consecuencia es la aparición de hinchazón o edema, ojeras, bolsas y arrugas alrededor de los ojos.
Para estos problemas existen soluciones estéticas que suelen retrasar su aparición, como las cremas de contorno de ojos, sobre todo para combatir las ojeras. Sin embargo, exigen una disciplina muy importante y evitar los malos hábitos adquiridos. Si optamos por esta crema es recomendable que sea sin perfume para evitar reacciones. En el mercado hay diferentes opciones con texturas refrescantes y efectos balsámicos que incluyen ingredientes que ayudan a activar la circulación sanguínea.
En cuanto a las bolsas, conviene probar productos que tengan propiedades relajantes, que refresquen y descongestionen. También hemos de cuidar las cejas ya que enmarcan la mirada y son esenciales porque muestran la expresión del rostro. En cuanto al maquillaje conviene siempre aplicarse productos ligeros con moderación y siempre con una limpieza a fondo del rostro, antes de irse a dormir.
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